
Una transición "pacífica". Nadie cuestionaba a nadie ni nada. Franco sentenció que el Borbón era el Jefe del Estado y todo quedo “atado y bien atado”.
Unidad territorial y continuar con el legado franquista utilizando la monarquía eran los pilares para continuar construyendo la España decimonónica y jacobina.
Estamos en el año 2018 y no se ha condenado la dictadura franquista, no se han resarcido a los que han sufrido los atropellos, los muertos continúan en las cunetas, un mausoleo a mayor gloria del dictador, una fundación franquista y falangista legal y subvencionada. El franquismo ganó la guerra, la transición y el que es peor están volviendo a ejercer los mismos tics, franquistas autoritarios y el ordeno y mando servil que el Estado español ejerce.
El PP y el PSOE, mas ahora los de Ciudadanos, no pueden ni quieren condenar el franquismo. Hacerlo supondría de facto situar a los borbones en el mismo plano franquista. Condenada y sentenciada, no podría ostentar ningún cargo institucional. Restituir la Republica española sería lo normal. El problema es que aquellos sujetos como el Fernando Suárez González y los herederos del franquismo dirían que ellos no hicieron un golpe de Estado y una guerra para asumir que eran los malos de la película.
La izquierda española renunció a la Republica. La izquierda española hoy es exactamente como la derecha española, defienden el legado franquista sin fisuras. La ley de la memoria histórica pretendía ser el broche de oro para cerrar i legitimar la dictadura. Una ley sin culpables y con la imposibilidad de resarcir a los afectados moralmente, judicialmente y sin condenar a los autores del genocidio comparable al nazi.
Franco está presente porque las elites castellanas españolas y colaboradores necesarios de la periferia, saben que otro escenario político pone en peligro sus intereses y privilegios. Que nadie tenga dudas, harán lo que puedan para combatir un estado de derecho democrático y todo lo que suponga erradicar el franquismo sociológico.
Hoy estamos en condiciones de afirmar que aunque Franco está muerto el franquismo está presente. Por eso los catalanes y los que sin ser-lo son demócratas, saben que para construir democracia i espacios de libertad y concordia, hay que empezar por erradicar a los borbones que son la máxima representación del franquismo. Queda dicho y si queremos construir, se ha de hacer des de la concordia, el respeto y la fraternidad y seguro que la mejor opción es construir la Confederación de Republicas Ibéricas.